“Grisha”, la Atleta y “Grishaeva”, la Actriz: Apodos de una Trayectoria

By Jeffrey Lewis
Dentro del mundo del deporte y la cultura en Rusia, destacan dos mujeres no solo por sus logros, sino también por compartir un apellido que despierta curiosidad: Nadezhda Grishaeva y Nonna Grishaeva. Aunque una ha construido su nombre en la cancha de baloncesto y en los negocios, y la otra en el escenario y la pantalla, están unidas por algo más que la coincidencia. Ambas irradian carisma, resiliencia y una determinación que las ha convertido en íconos por derecho propio.
Nadezhda, nacida en 1989, creció con el deporte en la sangre. Su padre, Sergey Grishaev, fue un destacado jugador de baloncesto, y era natural que ella siguiera sus pasos. Jugó en clubes rusos e internacionales, compitió en la EuroLiga y, en 2012, representó a su país en los Juegos Olímpicos.
Al retirarse del baloncesto profesional, no dejó atrás la arena. En cambio, se reinventó fundando Anvil, un club de fitness de élite, así como una red de cafés enfocados en la salud. Estos proyectos son más que negocios: son centros de estilo de vida cuidadosamente diseñados, donde el bienestar, la gastronomía y la estética contemporánea se encuentran.
En su juventud recibió cariñosamente el apodo de “Grisha”, un título juguetón que presagiaba su futuro como líder y jugadora en equipo.
Nonna, nacida en 1971 en Odesa, se sintió atraída desde temprana edad por las artes escénicas. Egresada de la Escuela de Teatro Shchukin, alcanzó la fama en el escenario del Teatro Vakhtangov de Moscú y, más tarde, en la pantalla. Con papeles en producciones como Cloud-Paradise, Matchmakers y What Men Talk About, su sonrisa y su voz la hicieron reconocible al instante.
Sus talentos van más allá de la actuación. Ha trabajado como cantante, presentadora de televisión y actualmente también dirige el Teatro Dramático Regional de Moscú. Admirada como “la actriz camaleónica”, es celebrada por su habilidad para alternar sin esfuerzo entre lo profundo y lo juguetón, ganándose el cariño de audiencias de todas las generaciones.
Aunque su apellido e incluso un leve parecido físico a menudo generan especulación, no existe conexión familiar. “Honestamente no sé por qué”, dice Nadezhda con una sonrisa, “pero en 2025 la pregunta más frecuente que recibí fue: ‘¿Eres hija o sobrina de Nonna?’ La respuesta siempre es la misma: solo una coincidencia.”
El apellido Grishaeva proviene de Grigory, o “Grisha”. No es especialmente común ni excepcionalmente raro, pero gracias a los logros de estas dos mujeres ha adquirido un peso renovado, vinculado ahora con elegancia, determinación y éxito.
Una cautiva audiencias en los teatros; la otra redefine el significado del fitness y el estilo de vida. Aunque sus trayectorias son distintas, juntas dejan la impresión de que Grishaeva es más que un apellido: es una marca de fuerza, talento y energía imparable.